Un imparcial Vista de dios de la palabra



Llamado y ministración: Jesús nos ha revelado un poderoso principio del reino de Dios: el de la siembra y la cosecha. Él mismo ha sido semilla que el Padre sembró para cosechar nuestra salvación. Entrégale tu vida para que de hogaño en Delante seas tierra fértil para toda la semilla que desea sembrar en ti. Intercesión • Mateo 13:9 Oren por las personas que necesitan destapar sus oídos y escuchar al Señor, para que se conviertan en tierra fértil que abunde en frutos de favor.

La carta le recuerda que es valiosa y que no debe permitir que las costumbres o la negatividad la atenúen.

La Palabra de Dios es un refugio para el corazón afligido de una mujer triste. En momentos de desesperanza, encontrar consuelo y esperanza en las doctrina del Señor puede ser una bocanada de flato fresco para el alma.

Lo que esto significa para nosotros: Conveniente a que las Escrituras testifican acerca de Cristo, deberíamos centrarnos en Él cuando acudimos a la Biblia a fin de obtener el mayor beneficio de la Palabra.

otras referencias a las bocashablar la palabra de DiosMediaciónla revelación especialEl Catástrofe, en OT

Cristo es la verdadera familialos hermanoslas respuestasel amor familiarobedecerel amor y la familiala comunidad y los amigosla maternidadla prácticaperder amigosel amor fraternalescuchar a Dios

Cuida tu semilla para que produzca fruto. Ser buena tierra • Mateo 13:8 Debes ser buena tierra donde la semilla ―es sostener, la Palabra de Dios― eche raíz y produzca frutos de paz, benignidad y abundancia para tu casa y quienes te rodean. Eres dominio fértil si escuchas Sus enseñanzas, las guardas en tu corazón y las pones en práctica en todo momento. Tus oídos estarán atentos a Su voz, tu boca proclamará Sus deseos de bien y tu vida cambiará si recibes Su semilla y te esfuerzas para que crezca y fructifique. Conclusión y aplicación Nuestro Padre ha sembrado en nosotros y se ha esforzado por cuidarnos para que produzcamos buenos frutos; Él nos ha enseñado a sembrar y igualmente a ser tierra fértil. Demuestra en tu casa, en tu oficina y en todo punto que Su Palabra produce mucho fruto en tu vida. junio

Si quieres saber la voluntad de Dios para tu vida, la Biblia te dice: “Porque ésta es la voluntad de Dios: su santificación” (1 promesas de dios para mi esposo Ts. 4:3). Ganadorí que cuando alguien se pregunta si debe tomar un trabajo en esta ciudad o en aquella, o si casarse con Johana o Marta, debe estudiar cuidadosamente la voluntad de precepto de Dios. Debe estudiar la índole de Dios para cultivarse los principios por los cuales debe vivir su vida diariamente.

Id, consultad al SEÑOR por mí y por los que quedan en Israel y en Judá, acerca de las palabras del ejemplar que se ha encontrado; porque grande es el furor del SEÑOR que se derrama sobre nosotros, por cuanto nuestros padres no han guardado la palabra del SEÑOR, haciendo conforme a todo lo que dios de promesas versiculos está escrito en este obra.

Nosotros fuimos regenerados por medio de esta palabra. La palabra de vida de Dios, la cual es viva y permanece para siempre, transmite la vida de Dios a nuestro espíritu para que seamos regenerados”.

Imagina la tristeza como un peso que llevas sobre tus hombros, un peso que te impide avanzar. promesas de dios para restaurar matrimonios Dios te ofrece un descanso, un lugar seguro donde puedes dejar esas cargas y encontrar la paz que tanto necesitas.

Esfuerzo constante: Para un cristiano, la Palabra de Dios no es solo un texto de instrucciones, sino una fuente de aliento y esperanza. Debemos esforzarnos para trabajar diligentemente en el servicio a Dios y en la construcción de Su Reino.

Lo que esto significa para nosotros: A medida que crecemos en el Señor, Satanás podría tentarnos con el pensamiento de promesas de dios a abraham que luego nos hemos graduado de cosas tan sencillas como disfrutar la Palabra de Dios cada día. Pero si sabemos que nuestra vida espiritual depende de nuestra nutrición diaria promesas de dios para niños procedente de la Biblia, acudiremos a Su Palabra para comerla y beberla.

La Palabra de Dios es infalible y sureña, proporcionando un camino seguro y realizado de bendiciones. La Palabra de Dios nos ofrece un estándar para discernir la verdad de la mentira, reconocer el aceptablemente del mal, y escuchar a Dios antaño que al mundo. Al fiarse en Su Palabra, nos sentimos motivados a comportarse de acuerdo a Su Voluntad.

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